EXPERTO EN KRABI KRABONG
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Por Jaime R. Nieto
DBMA España
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No resulta descabellado afirmar que las Dog Brothers Martial Arts siguen una filosofía similar a la del Jeet Kune Do, concibiendo en el combate como una entidad única con varias facetas que es necesario abordar con diferentes herramientas.
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Así, el sistema integra diversas disciplinas como el Kali, el Grappling, que se contempla principalmente desde la perspectiva del Jiu Jitsu, pero también desde las propias AA.MM. filipinas y algún otro sistema, e incluso el Jun Fan Gung fu que forma parte del subsistema de mano vacía propio conocido como Dog Brothers Vale Tudo.
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Y dentro de ese grupo se encuentra también el Krabi Krabong o combate con armas tradicionales de origen thailandés, el cual a su vez podría tener origen hindú con influencias chinas. Este sistema trabaja con diferentes armas, de entre las cuales una de las más emblemática y de mayor interés para el tema que nos ocupa son las espadas dobles o Daab song mue.
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Para este arte contaron con la guía de Ajarn Arlan “Salty Dog” Sanford, co-fundador de los Dog Brothers e Instructor certificado por el Instituto Buddaiswan en Thailandia. Se puede decir que los Dog Brothers fusionaron exitosamente este arte con el Kali en lo que se ha dado en llamar “Los Triques”, enfocado al combate con dos palos algo más largos de lo habitual y que incluye un oportuno repertorio de patadas para moverse entre rangos de distancia.
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En esa línea de trabajo, otro gran exponente dentro de los Dog Brothers es Kru Rene “Growling Dog” Cocolo, otra gran autoridad en el Krabi Krabong y el protagonista de la entrevista que ofrecemos a continuación. Rene compartió con Guro Benjamín “Lonely Dog” Rittiner un campamento de entrenamiento en España durante el pasado mes de Septiembre y en el que ya informamos en la anterior edición de EL BUDOKA 2.0. La entrevista ofrece una interesante panorámica de su trayectoria, personalidad y la abierta forma de pensar de este artista marcial.
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¿Cómo y cuándo te iniciaste en las artes marciales?
A los diez años. Comencé con el boxeo y continué con el Jeet Kune Do, el Muay Thay, el Kali Filipino y el Silat; y otras cosas que he olvidado ya.
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¿Y en el Stickfighting? ¿Cómo fueron tus primeros pasos y con quién?
Pues en 1991 me encontraba enseñando en un campamento de Jeek Kune Do y allí conocí a Philip “Sled Dog” Gelinas. Le vi combatir con palos y en mi mente surgió la idea: “un día de estos voy a pelear así”.
Pasaron los años y un día, tras jubilarme de las artes marciales en 2005 por la política y otras tonterías que pasan en este mundillo, ya sabes, estaba pasando el rato en YouTube con un whisky y encontré los vídeos de los Dog Brothers. Viéndolos me acordé de aquel encuentro hace más de diez años con Sled Dog, así que bebí un poco más de whisky, le llamé a él y a Marc Denny y les dije “voy a pelear en un Gathering”. Y comencé a prepararme.
Mis maestros de Stickfight fueron un señor que se llama Makoto Kabayama, de Toronto, versado en JKD; Philip Gelinas y el propio Marc Denny; y después, cuando empecé a estudiar Krabi Krabong, fue Arlan Sanford “Salty Dog”.
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Además del Krabi Krabong, ¿qué otros sistemas practicas?
Comencé con el sistema de Inosanto y el Pekity Tirsia. Y entrenaba con cualquier persona que hiciera algo con palos. Luego me metí ya con el Krabi Krabong.
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Ventajas y desventajas del palo de Krabi Krabong respecto al de Kali-Eskrima.
Normalmente, el palo del Krabi Krabong es de 36 pulgadas (91,44 cm) y los de Kali van desde 28 pulgadas (71,12 cm) hasta 31 pulgadas (78,74 cm); pero cuando coges el palo de Krabi Krabong, como se sujeta bastante arriba, tienes de 26 (66,04 cm) a 28 pulgadas desde la punta hasta la mano.
Para mí no hay diferencia entre ellos. Como digo, el de Krabi Krabong es de 36 pulgadas pero se sujeta más arriba; ahora bien, si quiero lo sujeto abajo. Yo no soy un peleador de Krabi Krabong. Sólo estoy en una pelea con un palo; si yo tengo una piedra en la mano, no soy un peleador de piedras sino que estoy en una pelea y tengo la piedra en la mano.
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Vamos a hablar del Krabi Krabong tradicional ¿Cuántas formas trabajas y cuál es tu favorita?
En el Krabi Krabong tradicional tenemos dieciséis armas diferentes y cada una de ellas tiene dos bailes. Mis favoritas son las espadas porque como peleo con palos, las espadas se asemejan a ellos. Mi segunda favorita son los Mae Sowks, una especie de tonfa, porque para mí es una de las armas más peligrosas. Y con ellos no se puede pelear al 100% porque si te alcanza un golpe, el K.O. es seguro.
Tengo que decir que el Krabi Krabong que practico es muy diferente del de otra gente porque yo hago Krabi Krabong de pelea, no de danza o exhibición.
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¿Y las diferencias entre el Krabi Krabong para espada y el Krabi Krabong para stick fighting?
Un palo es un palo. Ya en el primer vídeo que hicieron los Dog Brothers se dijo: “esto es un palo, no una espada…”. Yo utilizo las espadas simplemente para enseñar y mostrar los ángulos. Pero pegar con un palo es diferente; con las espadas no puedes golpear de la misma manera.
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¿Cuál crees que es el nivel de stickfight en España? ¿Y el de Krabi Krabong?
El nivel de los peleadores es fantástico. ¡Me encanta la gente de aquí!
Respecto al Krabi Krabong, aunque hay gente que lo ha practicado, no puedo darte una respuesta honesta ya que no he visto una clase de Krabi Krabong en España. Y la verdad, no me importa; mientras lo estén practicando es lo que me interesa, que continúe el arte.
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Sobre tus experiencias en combate, ¿cuál ha sido el peleador más difícil al que te has enfrentado?
El mejor peleador, para mí, es el que acaba de empezar. Debido el miedo que tienen, para ellos no hay reglas; no saben lo que está sucediendo y quieren sobrevivir. Los que me han hecho más daño han sido quienes peleaban por primera vez; porque el miedo que tienen les empuja a hacer lo que sea para sobrevivir y cuando te dan, te dan.
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Según tú, ¿quién es el mejor stickfighter? ¿Por qué?
Es una pregunta difícil. Porque para mí, los mejores siempre han sido los originales, los primeros, simplemente por haberlo hecho; fueron todos juntos, codo con codo, quienes lo hicieron posible. Pero hay que reconocer que hay gente muy buena. Por ejemplo Eric “Top Dog”, a quien por alguna razón le llamaron así; y Marc Denny, y Arlan Sanford, son gente que siempre van a ser los mejores.
También hay un tío que se llama Benjamin, que por la manera en la que enseña y pelea, es fenomenal.
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¿Cuáles son las cualidades que debe tener un buen peleador? ¿Quiénes te han sorprendido en tu carrera? Por ejemplo, alguien que fuese capaz de pelear varias veces por encima de sus capacidades físicas/marciales.
Para mí la mejor cualidad es una mente libre, que no se impone restricciones y con el deseo de aprender. Un ejemplo de buen peleador: uno de mis estudiantes que acudió a un Gathering y, la verdad, no lo estaba haciendo muy bien. Yo lo miraba en plan: “¿Qué está pasando aquí?”. Resultó que tenía cáncer y estaba en tratamiento con quimioterapia. ¡Pero peleó! Y otro que se llama “Grey Dog”, Brett Simms. Combate hasta que tiene el cuerpo completamente roto; en un Gathering peleó diez veces, y eso es mucho.
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Si tuvieras que empezar de cero, con todo lo que sabes, ¿cuál crees que sería el mejor camino para formarte como el stickfighter ideal?
Para aprender desde cero no importa el cardio o lo que sea. Simplemente, ve a una clase, empieza ahí. Es la mejor manera de comenzar. Cuando conocí a Philip fui a su clase y después, durante cuatro días, tuve el cuerpo roto; pero así es como aprendí, no es nada especial. Lo único que tienes que hacer es ir a clase, y empezar así.
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¿Cuál es el régimen óptimo de entrenamiento para un grupo que quiere desarrollar peleadores?
Encuentra gente que quiera pelear, queda con ellos, y deja la clase abierta. Por ejemplo, si en mi clase tengo a alguien que hace grappling, cuando viene le digo: “Hoy enseñas tú”. Ser maestro no significa nada, debes permitir la gente que te enseñe a ti también; pero debes juntarte con gente que tenga la misma mentalidad.
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Existe riesgo en RCSF ¿Cómo lo gestionas? ¿Algún marco común?
¡Jajajajaja! Me río porque me he roto los brazos, las manos, los pies… El riesgo es que, simple y llanamente, te puedes hacer mucho daño. Y yo me lo he hecho. Pero para mí se trata de algo muy puro que te enseña lo que debes trabajar. Cuando yo comenzaba en Kali, mi maestro me decía: “Si te dan en el brazo, mueres en tres días”, e idioteces similares. Pero la realidad de las peleas me enseñó quién soy yo…
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