Por EL BUDOKA 2.0
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Hace unos pocos días, nuestro protagonista, Javier Ferrer, se presentó al examen para Cinturón Negro de Mugendo… Tras unos años acudiendo a las clases regulares y otros tantos días de preparación, y con algo de nervios, superó un examen exigente que le permite lucir con orgullo el preciado Cinturón Negro y una nueva indumentaria. Todo ello como recompensa a un tiempo de esfuerzo y sacrificio guiado por unos buenos instructores que han sabido encauzar un carácter fuerte, en una persona seria y responsable que atesora un noble corazón. Una agradable charla con él nos descubre sus sensaciones:
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¿Recuerdas tu primer día entrando al gimnasio para practicar Mugendo? ¿Recuerdas qué fue lo primero que aprendiste?
Sí, lo recuerdo. Me enseñaron entre otras cosas a lanzar un jab y otras técnicas de puño… Y lo que más me costó fue dar una patada porque en la primera que probé me resbalé y caí al suelo (nos explica entre carcajadas).
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Y desde entonces, habrás aprendido muchas cosas… ¿qué es lo que más te gusta y lo que más te ha costado?
Bueno, lo que más me ha costado es aprender alguna serie de combinación por que tenía una básica difícil… y lo que más me ha gustado es ir cada día, aprender un poco más y estar con mis amigos en el tatami, y pasármelo bien con ellos.
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Hace pocos días superaste el examen de Cinturón Negro… ¿cómo te sientes?
¡Muy bien, muy feliz!
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Habrán sido unos cuantos días preparando el examen, esforzándote ¿estás satisfecho de haberlo conseguido?
¡¡Si, sí, muy satisfecho!!
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¿Érais muchos compañeros haciendo el examen?
Éramos alrededor de 35 compañeros. De Sant Cugat íbamos 5 a examinarnos y que hemos estado preparándonos para el examen cada viernes durante tres meses, además del tiempo que ya llevábamos.
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¿Recuerdas si estabas nervioso, o lo llevabas muy bien preparado y estabas seguro de ti mismo?
La verdad es que las primeras semanas no estaba nervioso, pero cuando fui al gran test, en diciembre, ahí ya empecé a ponerme nervioso. Pero al final lo superé bien.
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El Cinturón Negro es el reconocimiento tras muchos días de esfuerzo… ¿Qué os han explicado que representa?
Sobre todo que requiere disciplina, respeto y unas aptitudes que debes trabajar. Y sin todos estos requisitos, no puedes llegar a ser Cinturón Negro.
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En las clases de Mugendo entrenáis la parte física, técnicas de pierna, de puño, incluso trabajo con armas, etc. Pero además tenéis que aprender y cumplir unas normas de respeto al Sensei, al compañero, disciplina, constancia… ¿qué opinas?
Pues me parece muy bien. Creo que son imprescindibles. Si me ponen a trabajar con un cinturón blanco y no tengo respeto, disciplina y cuidado, como han tenido conmigo, podría hacerle daño sin querer. Tengo que ponerme a trabajar a su nivel.
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¿Practicas algún deporte además de Mugendo?
Sí, practico hockey sobre patines tres veces por semana además del partido del fin de semana.
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Crees que todo lo que aprendes en Mugendo puede serte útil en tu día a día, en el hockey. Por ejemplo, seguro que ante un problema, algo que no te gusta, te ayuda a controlar tus impulsos, los nervios…
Pues creo que la parte mental, sí; he aprendido qué es la constancia, el respeto… Y en la parte física me siento más fuerte, y sí tuviera que defenderme tendría unos conocimientos, si fuese necesario.
Una cosa que nos han explicado es que sólo deberíamos emplear las técnicas que nos enseña nuestro Sensei como último recurso, siempre antes debemos usar las palabras.
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La falta de respeto a los demás, la poca educación es algo muy evidente en la vida cotidiana. En Mugendo estáis trabajando para combatirlo, ¿no es así? ¿Qué os explican en las clases?
En primer lugar que el respeto es fundamental para entenderse con la gente, la educación, sobre todo con los más mayores, tener respeto con todos… ayudar a los más pequeños.
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Cuando sales de tu clase de Mugendo, seguramente cansado, pero con la cabeza despejada de los problemas que todos tenemos (trabajos del cole, exámenes, etc.) ¿te has parado a pensar que todo ese rato que te lo has pasado bien, has estado sin ninguna pantalla, son móvil, ni ordenador…?
Sí, claro, me gustan las pantallas, pero ese rato que estoy con los amigos, entrenando, preparándome, me lo paso muy bien y ni me acuerdo de las pantallas. Me lo paso muy bien haciendo Mugendo.
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¿Tienes amigos que vayan contigo a practicar Mugendo?
Del colegio no, pero mis compañeros de Mugendo ya son mis amigos. Y con ellos me veo cada semana.
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Seguro que ya te lo han explicado, pero ahora con tu Cinto Negro eres un ejemplo para lo que han empezado más tarde que tú, que llevan menos tiempo… Si sigues trabajando como hasta ahora podrás ser su Sensei, seguro que eso también va hacer ser más responsable y trabajador ¿Lo habías pensado?
Pues sí, a mí en un futuro me gustaría ser profesor de Mugendo, ser un Sensei de mi Club. Me siento muy bien con lo que estoy haciendo y aprendiendo, y me gustaría transmitirlo.
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¿Trabajáis con algún tipo de arma?
No de forma habitual, pero alguna vez el Sensei nos enseña a manejar los nunchaku. Él con uno de madera y nosotros con unos de espuma. El bo (palo largo) de momento no lo usamos.
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¿Y trabajo de sparring?
Sí, también hacemos sparring, pero nos explican que esos 10 minutos nos tenemos que imaginar que nuestro compañero es un agresor pero al que no debemos golpear muy fuerte y sobre todo ponernos a su mismo nivel. Debemos hacer bien las técnicas pero controlando nuestra potencia. Hay que cuidar a la persona que nos ayuda a progresar.
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¿Y para ello lleváis, guantes, casco…?
Sí, guantes, botines, casco, espinilleras y bucal, pero eso en función del nivel que tengas…
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