Por Miguel A. Ibáñez Espinosa (autor)
Director de Grados de NTJ de la RFEKDA
6º Dan Nihon Tai Jitsu / Nihon Jujutsu
5º Dan Aikijujutsu Kobukai
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Roland Hernaez es un maestro de sobra conocido por los budokas españoles. A sus 89 años, cuenta con más de setenta años de practica de Judo, Karate, Aikido, Shorinji Kempo, Taijitsu y otras disciplinas a sus espaldas, toda una vida dedicada a las artes marciales.
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Durante el transcurso del Congreso Internacional de la FMNITAI el Maestro nos permitió compartir con él una larga conversación, que pareció transcurrir en unos breves instantes, sobre las artes marciales y el Budo en general. Transcribirla nos daría para casi un libro y por ello vamos a intentar sintetizar algunos de sus aspectos en este breve artículo.
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Maestro, hemos tenido la oportunidad de conversar múltiples veces con usted sobre muchos aspectos, hoy nos gustaría preguntarle por el origen del reishiki de Nihon Tai Jitsu, ya que parece que une elementos de distintas disciplinas.
Es una muy buena pregunta, en primer lugar me gustaría aclarar que el Nihon Tai Jitsu no es una compilación de técnicas y por tanto su reishiki tampoco es una compilación de formas de otras disciplinas. El Nihon Tai Jitsu es un sistema japonés que encontramos dentro del Ju Jutsu, el maestro Minoru Mochizuki era un buscador incansable, un gran técnico que contaba con una gran inteligencia y sobre todo un enorme sentido de la pedagogía. Él quería que la separación que existía en esa época entre las distintas artes marciales desapareciera y que pudiéramos encontrar una disciplina en la que encontráramos todo reunido.
Para el maestro Mochizuki el Tai Jitsu eran las “técnicas del cuerpo”, es decir, el cuerpo y la técnica. Por lo tanto, el Tai Jitsu debía poder adaptarse a cualquier arte marcial tradicional, japonés en principio ya que era su marco de acción. En su experiencia, un taijitsuka debía ser capaz de hacer un randori de Judo sin ser judoka o de enfrentarse a cualquiera con técnicas de golpeo de Karate, por poner un ejemplo. Esto no era una invención de su parte, yo he tenido la ocasión de ver con él escritos antiguos, del siglo XVII, en los que esto ya se mencionaba, es decir el Taijitsu formaba parte del Jujutsu. Esto es muy importante, ya que son nuestros orígenes.
Mochizuki era asistente del maestro Jigoro Kano, él conocía perfectamente la organización técnica del Judo en Japón. Por ello, Kano lo envió a aprender con Ueshiba para que pudiera darle su visión de cómo evolucionaban otras artes marciales. Con el Karate hizo lo mismo, si bien no fue su especialidad… Kano quiso siempre que Mochizuki trabajara otras artes marciales para que pudiera abrir las artes marciales japonesas al mundo occidental. Su idea era extender el espíritu de prosperidad mutua entre los pueblos en base a las artes marciales japonesas, ese es el espíritu que él quiso transmitirle a Mochizuki, el cual siguió el ideal de su maestro a lo largo de toda su vida. Usted pensará que no le he contestado a su pregunta… ¡y tiene razón!, para llegar a la respuesta tendremos que desgranar un poco más nuestra historia para que sus lectores lo comprendan mejor.
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De acuerdo… ¿Cómo recuerda usted el momento en que conoció a Minoru Mochizuki?
La primera vez que yo encontré al maestro Mochizuki, yo era un joven profesor de Judo, si bien yo no era cinturón negro aún. Asistí a un curso suyo y recuerdo que quedé entusiasmado… tanto es así, que he tratado de seguir a lo largo de mi vida tanto sus principios técnicos como filosóficos.
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Nos surge una duda, ¿usted conoció primero a Jim Alcheik o al Maestro Mochizuki?
Al maestro Mochizuki, sin duda. Jim Alcheik no conocía aún a Mochizuki y sería algún tiempo después cuando lo conoció. Jim era un profesor de Judo, de origen tunecino y judío. Un día tuvo un “problema” con un árabe que le intentó agredir. Desgraciadamente, durante el altercado Jim le hizo una proyección resultando su agresor muerto a causa de la misma. Jim decidió en ese momento aprender otro tipo de técnicas que le permitieran resolver situaciones de ese tipo con mucho más control, sin importar el tipo de adversario o la agresión, pudiendo controlarlo sin poner en riesgo al adversario o su integridad física. Esto es lo que nos cuenta la “leyenda”… Esto es tal y como me lo contó Jim.
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¿Cómo se fraguó entonces ese encuentro entre Alcheik y Mochizuki?
Mi profesor de Judo, Mikonosuke Kawaishi, envió a Mochizuki a difundir las artes marciales, en especial las que trabajaba la escuela Mochizuki, en algunos países del Magreb como Argelia o Túnez. Fue en ese momento cuando tuvieron contacto. Jim nada más conocerlo quedó entusiasmado y decidió viajar a Japón para aprender con él. De allí trajo el espíritu Mochizuki y su Tai Jitsu.
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¿Cómo era el Tai Jitsu que el trajo en esa época?
Como ya he dicho, todas sus enseñanzas estaban impregnadas del espíritu y la “filosofía Mochizuki”, si bien su Tai Jitsu era muy primario y pedagógicamente muy pobre ya que no tenía ninguna estructura para hacer progresar al alumno. Cada día se trabajaban conceptos de defensa personal totalmente desconectados de los que se habían trabajado con anterioridad… Todo era muy confuso y excesivamente mezclado. Como ya he comentado era una mezcla de técnicas sin nada que las conectaran. ¡No existía ningún hilo conductor! Independientemente de eso, yo quedé impresionado por su capacidad técnica.
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¿Qué le llevo a realizar “su metodología” del Tai Jitsu?
En ese momento yo ya era profesor de educación física, dentro de mis estudios yo había conocido un método pedagógico que me había fascinado, el hebertismo. George Hébert era un oficial de la marina francesa que creó un método “naturista” de educación física muy interesante, en su método él quería que los alumnos hicieran las cosas de forma natural y lógica, y ese principio servía para todas las actividades físicas.
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¿Ese método lo conoció en Antibes durante su servicio militar?
No, yo ya era profesor de educación física entonces. En Antibes conocí un método de combate cuerpo a cuerpo muy intenso, muy físico y muy duro. Tanto física como mentalmente… Hoy en día creo que siguen igual, yo guardo un recuerdo muy especial de esa época ya que me ha ayudado mucho en el desarrollo posterior de mi vida.
Mi maestro de Judo, Kawaishi, también hizo su método para enseñar el Judo. Su método era excepcional para el desarrollo de los alumnos hasta el primer dan, posteriormente la progresión era diferente. Él daba una serie de técnicas al alumno, agrupadas por familias técnicas y en un orden que daban al alumno una progresión metodológicamente hablando impresionante. ¿Conoce usted el porqué de su método?
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Sí, usted ha tenido la amabilidad de contármelo en alguna ocasión. Pero estoy seguro que a nuestros lectores les interesará.
El maestro Kawaishi en esa época tenía una pizarra en el dojo, y allí anotaba las técnicas que se iban a trabajar en la clase. Yo tenía en esa época un gran amigo, que desgraciadamente ya ha fallecido hace algunos años, Maurice Cottreau, él fue de los primeros franceses en obtener el cinturón negro de Judo. Maurice era panadero y trabajaba de noche. El maestro Kawaishi le encargó de la “intendencia” del dojo, él lo limpiaba y se encargaba de que todo estuviera en orden. Una mañana, Maurice llegó al dojo y vio las técnicas escritas en la pizarra, para ayudarse a memorizarlas las numeró ya que los nombres estaban en japonés y era algo difícil para nosotros los franceses memorizarlos. Así, él se ayudaba para memorizarlas, la historia y la coincidencia hicieron que una mañana el maestro Kawaishi llegara más pronto de lo habitual, y Maurice no tuviera tiempo de borrar la pizarra… imagínense… el maestro Kawaishi era súper-estricto con que nadie usara sus cosas. Maurice comenzó a temblar al ver que el maestro estaba mirando la pizarra y recitando por lo bajo las técnicas y los números que él había escrito. Cuando Maurice comenzó a excusarse y fue a borrar los números, Kawaishi que era muy inteligente le dijo “¡No! Deja lo números como están!” y empezó a reflexionar sobre ello. Quince días después el maestro empezó a usar los números asociados a las técnicas para nosotros los europeos, así nace el Método Kawaishi que tanto éxito dio en la difusión del Judo en Francia.
Pero volvamos a la metodología del Tai Jitsu, yo lo descubrí en 1957, cuando era un joven que estaba preparando su segundo dan de Judo. Yo buscaba un método para poder enseñar a mis alumnos primero en el Judo y posteriormente en lo que fui trabajando con Jim. Después de estar unos años trabajando con Jim, y con posterioridad a su muerte decidí hacer nuestra metodología para poder enseñar el Tai Jitsu. Yo no inventé nada, y mucho menos técnicas, lo único que hice fue realizar una metodología para poder enseñar lo que Jim había traído de Japón.
Ahora si le parece vamos a volver a su primera pregunta sobre el reishiki. La cuestión es que en 1977 ya teníamos nuestra metodología hecha, y mi gran amigo Jacques Delcourt, entonces presidente de la Federación Francesa de Karate nos ofreció entrar como disciplina asociada a dicha federación. La cuestión fue que para poder entrar en la federación nos faltaban en el programa los kata y él quería que tuviéramos kata como en Karate. Yo trabajé con mi hermano George y un alumno mío, Daniel Dubois, en la confección de los kata de Base y posteriormente en los Kata Fundamentales, los presentamos a la Federación Francesa de Karate y nos dieron su visto bueno. Pero esta historia ya se la contó mi hermano en su entrevista. En junio de 1977 entramos como primera disciplina asociada a la Federación Francesa de Karate.
Vayamos ahora a la cuestión del reishiki, en la creación de estos Kata Fundamentales con pareja, mi hermano y yo buscamos trabajar dentro de la tradición japonesa, manteniendo el reishiki de sus artes marciales en los kata con compañero. A diferencia del Karate que no tiene este tipo de trabajo salvo en el bunkai. Quiero contarle aquí la anécdota de mi gran amigo, Henry Plée: cuando él empezó a hacer Karate él creía que los kata de Karate eran como en Judo por parejas y tuvo que venir Don Dragger a sacarle de su error. Una pequeña anécdota sin importancia que ilustra el conocimiento de esa época.
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¿Entonces los kata de Tai Jitsu nacen de una necesidad administrativa más que de la necesidad técnica?
Básicamente sí, pero aprovechando ese trabajo decidimos introducir como idea pedagógica de partida en ellos, aparte de que contuvieran técnicas interesantes, la idea de construir algo bien estructurado con los tai sabakis ordenados, las técnicas de base, cómo descubrir las técnicas y la defensa personal, etc. Posteriormente llegarían los kata tradicionales del maestro Mochizuki y las adaptaciones de los kata del maestro Sato. Como hemos explicado esta mañana, la última incorporación ha sido la creación del Daini no Kata, como elemento de unión entre el Nihon Tai Jitsu y el Nihon Jujutsu; y los Kodomo no Kata para los niños.
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Entonces, ¿el reishiki que se utiliza en Nihon Tai Jitsu de dónde proviene?
El Reishiki que nosotros utilizamos tiene elementos del Karate y del Judo. Si bien en el Karate se utilizan generalmente los puños cerrados para el saludo, en el Judo/Jujutsu se utilizan las manos abiertas. En el NTJ ambos son utilizables, quiero recalcar que no imponemos ninguna de las dos formas, es el alumno quien debe decidir cuál quiere hacer. ¡Insisto! en NTJ jamás diremos esa forma es mala o esta forma es obligatoria.
El saludo inicial se hace con las manos en los lados para los hombres y con las manos delante de los muslos para las mujeres… pero esto es por una cuestión de tradición japonesa nada más.
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Cuando se saluda en seiza, ¿cómo lo hacemos? ¿manos juntas o separadas?
Como en Judo… aunque también mantenemos la idea del trabajo de sable. En lo referente a las manos separadas y las apoyamos a la vez. Nuestra disciplina es una disciplina de confianza entre nosotros… el maestro Mochizuki insistía mucho en este aspecto. El hecho de poner primero la mano izquierda en el suelo era una señal de desconfianza entre las dos personas, por eso el maestro Mochizuki insistía mucho en que pusiéramos las dos manos en el tapiz al mismo tiempo. En Nihon Tai Jitsu y Nihon Jujutsu lo hacemos así.
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Algunos alumnos nos preguntan por qué tienen que girarse los profesores hacia la derecha cuando se saluda al shomen…
Volvemos a la tradición… es una cuestión ligada también a los samuráis… de hecho en la mayoría de los ejércitos de nuestros días se gira también siempre hacia la derecha. No es obligatorio… ¡pero es un detalle! Es otra tradición… como ayer explique es el mismo ejemplo que el uso de los cinturones rojos y blancos (usados a partir de 6º Dan). En Japón sólo utiliza este cinturón el profesor que va a dar una clase o una ponencia, y su asistente si tiene ese grado. El resto, aunque tengan más grado llevan siempre el cinturón negro. En cambio, en Europa normalmente a partir de sexto dan los practicantes mantienen siempre su cinturón rojo-blanco. ¿Esto está mal? No, no es obligatorio llevar el cinturón negro, pero si vas a Japón lo cortés es no llevarlo salvo que vayas a dar la clase. Esto me pasó con un amigo de Karate francés, 7º Dan. Un día él fue al Seibukan en Japón, y yo le escribí una carta de recomendación para poder practicar allí, algo habitual en esa época. Cuando él volvió, quedamos para comer, yo estaba seguro que él me iba a decir que todo había ido “súper”. Entonces él me dijo que todo bien salvo en Seibukan, allí él llevaba su cinturón blanco-rojo cuando entro al tatami y nadie se ocupó de él… todos pensaban que él estaba allí para corregir y enseñar, ¡no para practicar!
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Como usted reseña, la tradición es muy importante para los taijitsukas…
Totalmente, quiero contarles otra pequeña anécdota del maestro Mochizuki al respecto. En Saint Etienne, el maestro Mochizuki dio un curso y posteriormente su hijo Hiroo hizo una demostración en la que estábamos presentes muchos profesores, a mi lado estaba mi gran amigo Luc Levannier, un gran judoka y competidor. Hiroo hizo una demostración vestido en kimono y guantes de boxeo, cuando lo vio su padre no estaba nada contento. Cuando Hiroo se fue a cambiar, su padre vino a hablar conmigo, y me dijo “¿por que mi hijo ha hecho esta demostración con dos cosas tan opuestas… guantes de boxeo y dogui?”. Cada cosa tiene su espacio, guantes de boxeo perfecto, karategui perfecto… pero no mezclados. Si bien es cierto que mi gran amigo Hiroo ha evolucionado su sistema de Yoseikan Budo en una dirección distinta.
Por retomar la cuestión… Yo comencé el Karate con mi amigo Henry Plée, y en paralelo el Aikido y el Tai Jitsu con Jim Alcheik mientras enseñaba Judo en mi dojo y seguía trabajando con el maestro Kawaishi. Yo me he mantenido a lo largo de los años en estas cuatro disciplinas. Aunque, no es muy conocido que tuve un par de jóvenes alumnos que fueron campeones de Francia de Karate… yo me considero además de taijitsuka un pequeño karateka…
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